La era digital está llevando a los medios de comunicación a una adaptación necesaria a la ‘sociedad de información’, que demanda nuevas formas de elaborar, estructurar y difundir las noticias, aprovechando al máximo las ventajas que proporcionan las tecnologías.
Esta transformación no sólo es visible en un nivel meramente técnico, sino que tiene un trasfondo social. Sin ir más lejos, hasta hace un par de décadas en el rubro periodístico todos tenían funciones delimitadas. Uno era el periodista, otro el fotógrafo, el diseñador, el camarógrafo, el corrector de estilo o el editor de video, entre otros. Hoy la situación es diferente.
Zulema Alanes, presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANP), indica que esas funciones se han transformado y han dado paso a una renovada forma de periodismo, denominado multimedia, que está innovando la profesión como tal y a la cual, todavía, se están “acomodando” los periodistas.
“Tengo la sensación de que estamos en un tiempo de acomodo y aprendizaje. Nos estamos acomodando a hacer nuestro trabajo, al igual que en otros oficios, de otra manera. Tenemos que ser capaces de aprovechar lo mejor que nos está proporcionando la tecnología para hacer lo que siempre hemos hecho: buen periodismo”, dice la periodista.
Búsqueda de la verdad
“La búsqueda de la verdad le da verdadero sentido al trabajo periodístico”, dice Alanes, a tiempo de aclarar que, con el surgimiento de las redes sociales, prácticamente todos se han vuelto en una “especie de periodistas ciudadanos”, pero que sólo el verdadero periodista resumirá en una noticia, las causas, las consecuencias, los protagonistas, dará seguimiento y, de forma ética y responsable, seleccionará las imágenes y las palabras que transmitirá a sus públicos.
En la actualidad, la población (público) está prácticamente “bombardeada” por información que llega desde diferentes medios, sean éstos masivos, redes sociales o los propios grupos de interés. Es aquí donde el periodista asume un rol trascendental porque muestra todo el contexto para que no haya equívocos cuando la información llegue al público.
Otro detalle es que los periodistas tienen una responsabilidad con sus audiencias, que es el seguimiento; es decir, la indagación o profundización del hecho y que en ese trabajo se pone en juego su credibilidad.
“La credibilidad e interpelación son fundamentales para construir una mejor sociedad, para construir un mejor Estado. Ese rol de la credibilidad e interpelación, entre otros, continúa intacto en la sociedad y depende de que hagamos bien nuestro trabajo como periodistas”, puntualiza. Para Alanes, el capital real de un periodista es la credibilidad.
Rol ético del periodista
Ryszard Kapuscinski no se equivocaba cuando decía que “una persona mala no puede ser periodista”, porque el tema ético en el oficio periodístico es clave.
¿Cómo se define la ética periodística? Para la Fundación Gabo, la ética periodística “es la obediencia del periodista a la naturaleza de su trabajo”.
En tanto, para el profesor José María Desantes “es la guía de los actos humanos e informativos que modelará el ser profesional y constituirá la medida de su cualificación. Se llama ética si comprende todos los aspectos personales, y deontología si sólo se refiere a los actos específicos profesionales.
Alanes considera que, cuando se habla de ética periodística, también se está hablando de autorregulación, es decir de la “sujeción a los códigos éticos que rigen nuestro trabajo (…)”.
El rol del periodista. prosigue, no cambia por más media o multimedia que sea el medio en el que trabaje. Sólo se facilita gracias a todos los recursos tecnológicos que tiene a su disposición.
Hoy, el periodismo está más vigente que nunca, señala la periodista, porque “lo único que tenemos que hacer es lo que siempre hemos hecho: ir detrás de la verdad y someterse estrictamente a los códigos de ética que deben regir nuestro trabajo, que en, última y primera instancia, tiene que tener el horizonte de servicio a la gente”.
En la misma línea, César del Castillo, coordinador de la carrera de Periodismo de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, asegura que el periodista tiene que ser absolutamente comprometido con la verdad que está tratando de descubrir. “(…) Tiene que tener fortaleza y fuerza para seguir adelante y no temblar ante las amenazas que van a surgir”.