Por Lily Zurita
La laguna Esmeralda, un atractivo de inigualable belleza natural en la región de los valles cruceños, se proyecta como destino ecoturístico del departamento de Santa Cruz.
Ubicado en el municipio de Quirusillas, de la provincia Florida del departamento de Santa Cruz, la laguna tiene un entorno natural excepcional, además de su gran importancia ecológica para el departamento debido a su biodiversidad de flora y fauna silvestre que alberga. Se trata de un área protegida creada en 2004 y que pertenece a la región de los valles cruceños.
El sector tiene un gran potencial turístico, pues es uno de los íconos naturales del departamento, ideal para realizar avistamiento de aves, por la diversidad de especies que tiene y la belleza paisajística singular que la caracteriza.
El director de la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, Javier Rivera Segovia, indica que el entorno de la laguna Esmeralda puede convertirse, con una buena política pública y estrategia de promoción turística, en un importante centro ecoturístico por las especies endémicas que conviven en ella.
“El valor turístico de la laguna Esmeralda gira en torno al punto geográfico en donde se encuentra ubicada, la belleza paisajística, el color del agua y las especies posibles de encontrar, la convierten en un lugar ideal para realizar camping responsable, avistamiento de aves o, simplemente, para realizar fotografía de naturaleza”, asegura.
La laguna Quirusillas, además de ser un área protegida municipal, está catalogada como un santuario de vida silvestre, denominación que obtuvo dentro de la categorización de áreas protegidas del departamento.
Un santuario de vida silvestre
La laguna Esmeralda y todo su entorno son un santuario de vida silvestre donde se pretende encarar políticas de conservación y protección de la biodiversidad y del hábitat natural, a fin de conservar toda su biodiversidad.
Asimismo, dentro del santuario se pueden llevar a cabo actividades científicas investigativas en torno a las plantas, animales o al mismo medio ambiente. “Es un lugar que se presta para educar y también recrear, pero de manera responsable a través de actividades turísticas que no sean dañinas del medio ambiente”, puntualiza el académico.
Ecoturismo responsable
Bolivia se encuentra entre los 15 países con mayor biodiversidad del planeta, según el Comité Nacional de Apoyo al Ecoturismo. El uso sostenible de esta riqueza patrimonial y la conservación de la naturaleza y de la cultura son impulsados por una renovada forma de promoción turística, denominada ecoturismo.
El ecoturismo es una tendencia relativamente nueva en el mercado turístico mundial que está combinando estrategias de conservación natural y patrimonial con las de desarrollo.
Dada la amplia variedad y cantidad de flora y fauna que la caracterizan, Bolivia es un destino ideal para el desarrollo del ecoturismo. Sus diferentes pisos ecológicos, que van desde heladas cumbres altiplánicas, valles templados y calurosos llanos, brindan a los viajeros una amplia gama de posibilidades para visitar.
Esta tendencia mundial (ecoturismo) ha sido entendida por las operadoras de turismo que están promoviendo experiencias únicas para los visitantes. El ecoturismo es “un viaje responsable a áreas naturales que conservan el ambiente y mejoran el bienestar de la población local”, según la Sociedad Internacional de Ecoturismo.
Rivera asegura que el ecoturismo busca ser una actividad sostenible en el tiempo para que la gente pueda aprender de la naturaleza. Además, tiene mucho que ver con las comunidades, es decir con las personas que viven en un territorio determinado, que pueden, a través del turismo, generar fuentes de ingreso.
“Hablamos de un turismo responsable y sostenible. El ecoturismo aprovecha emprendimientos locales, contrata servicios en las comunidades locales para promover su economía y que ellos se vean beneficiados económicamente de la actividad, sin generar impacto negativo”, dice el académico.
No existe una actividad que genere impacto cero; por eso, el ecoturismo intenta promover actividades que tengan el menor impacto posible, a partir de estudios acerca de la capacidad de carga turística (cantidad de visitantes que un lugar puede soportar sin afectación del entorno), que no afecte a la biodiversidad de un determinado lugar.
Bolivia se encuentra entre los 15 países con mayor biodiversidad del planeta
Santa Cruz biodiversa
Santa Cruz es un departamento de extenso territorio, rico en biodiversidad y una gran cantidad de microclimas en cada subregión ecológica, caracterizadas por diferentes altitudes, climas, vegetación y especies de animales.
“Lastimosamente, la expansión de la frontera agrícola y prácticas que no son las ideales, como los chaqueos (…), están provocando que Santa Cruz pierda un aproximado de 17 mil hectáreas de bosque por año, lo cual implica la pérdida de una gran cantidad de especies animales endémicas”, finaliza Rivera.
Minga de limpieza
Hace pocos días, estudiantes de la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, realizaron una “minga de limpieza” en la laguna Esmeralda, en el marco de su política de responsabilidad social y medioambiental.
Las actividades se concentraron, principalmente, en el retiro de algas que empezaron a cubrir las aguas de la laguna y que afectan a los peces y demás biodiversidad que alberga. Para la jornada se utilizaron bolsas biodegradables fabricadas con almidón de yuca, a fin de disminuir el impacto ambiental que provocan las bolsas plásticas.
La actividad fue coordinada por la carrera de Administración de Hotelería y Turismo de Unifranz con el Gobierno Departamental de Santa Cruz, a través de la unidad de Promoción Turística. Se espera replicar la misma en otros atractivos naturales del departamento.
